Por cualquier consulta, crítica y/o sugerencia, dirigirse a la siguiente dirección de mail:

neuronadeportiva@gmail.com

viernes, 14 de abril de 2017

¿Y ahora?

Ok, Bauza out...y ahora? Muy fácil tomar una decisión que decantaba como obvia, pero no tan fácil trazar un plano bajo circunstancias tan inciertas.
Evidentemente, y como mencionamos en blog anteriores, dependemos pura y exclusivamente de lo que decida el nuevo técnico. ¿Se visualizan a futuro grandes cambios en las citaciones regulares de los últimos años de la selección nacional? No...no se esperan grandes cambio. Entonces, ¿cuál era realmente el problema? ¿Era una cuestión táctica? Evidentemente si. ¿O es que acaso si Sampaoli se confirma como nuevo DT de la selección, el hecho de que los jugadores entrenen con tecnologías similares a la de Playstation nos acercan a la Copa del Mundo de maneras nunca antes imaginadas? Sin querer aparentar un retrogrado en las tácticas de equipo, no puede escapar a mi cabeza que los jugadores van a ser los mismos. Los mismo que tienen tantos años de experiencia en el fútbol más competitivo del mundo. Pero estas nuevas técnicas vas a hacer que sean mejores dentro del campo de juego. Que se entiendan mejor entre ellos, como si antes tuvieramos maquinas automatizadas que solo reconocían parámetros preestablecidos tácticamente que condicionan sus acciones...
La realidad es que cambiará un nombre. Para ser justos nada mas y nada menos que el nombre del gerente general de la empresa. Los 23 empleados serán los mismos, o casi los mismos. Con las mismas capacidades, pero quizás con distintas herramientas para desarrollarlas. La única diferencia a nivel empresarial, es que hablamos de grandes profesionales, con muchísimos años de antigüedad dentro de un mismo circuito. Entonces, si las cosas realmente cambian, sera porque ellos realmente quieren que cambien,
No van a jugar con una pelota distinta, ni en una cancha de distintas dimensiones, ni contra rivales diferentes a los ya enfrentados.
Podemos ir a las diferencias técnicas, a la diferencia de estilos, todo muy lindo. Pero a este nivel, con esta jerarquía de jugadores, no aplica tan estictamente este principio. Son jugadores que saben moverse en una cancha interpretando, y no solo ejecutando, las órdenes del técnico. No cumplen al pie de la letra, sino que interpretan órdenes de la forma en que mejor se adaptan al funcionamiento del equipo y al desarrollo de un partido. Esto es a menos que estemos hablando de robots sin cerebro ni experiencia. O de un equipo absolutamente amateur. No es el caso...
Creo profundamente que el cambio va a ser para mejor. Pero no por una cuestión netamente futbolística, sino por una cuestion psicologica. De hartazgo táctico.
Planteemos dos situaciones tan hipotéticas como potencialmente reales:

Situación 1: En el primer partido sin Bauza, Argentina deslumbra, aun sin jugar Messi. Sobresale en todas sus lineas y destruye al rival que esté al frente. Esto es extremadamente posible conociendo nuestro potencial. ¿Es posible conociendo nuestro ultimo rendimiento? Habria quien diga que pasaron muchos meses entre actuación y actuación pero, ¿alguien cuestiona las actuaciones individuales en cada club al momento de jugar la selección? Porque al fin y al cabo ese es el único condicionante a nuestro análisis previo. ¿Será porque cambiamos de técnico? Quizás. Mismo equipo, distinto rendimiento. Puede pasar. ¿Por qué pasa? A nadie le importará si es para mejor y en el Monumental escucharemos "Que de la mano, de Sampaoli, todos la vuelta vamos a dar"

Situación 2: Higuaín es citado nuevamente. Mete 3 goles en el primer partido y Argentina golea. Héroe nacional? Lo dudo seriamente.... Definitivamente, luego de este partido, ¿se vuelve indudable su citación? Para nada...Entonces que lejos estamos de poder hacer un análisis serio y exhaustivo de cada partido. El técnico sería el héroe salvador sin duda (hasta reconfirmar en el siguiente partido), a pesar de parar a los mismos jugadores que el técnico anterior. Pero si un jugador que no venía rindiendo con los tecnico anteriores, repentinamente deslumbra en su  actuación, es simplemente una circunstancia del destino, Tan desechable como todo lo anterior.

Estas dos circunstancias reflejan claramente que corto y exitista que es nuestro análisis de la selección. Por esto tenemos al equipo que tenemos, por esto luego de una década discutimos al mejor jugador del mundo como lo hacemos, y por este mismo motivo, tenemos a la asociación de fútbol que nos merecemos. En cuanto reconozcamos que cada uno de nosotros no solo no somos jugadores, sino que no somos técnicos ni dueños de la verdad absoluta, quizás solo entonces, dejemos que los que entienden ejecuten, sin juzgamientos llenos de ignorancia, y nos lleven a un lugar bastante mejor del que estamos.