Sacarse la camiseta es una de las cosas más difíciles de hacer a la hora de hablar de la selección Argentina. Pero el hecho de que escriba con la camiseta puesta no es sinónimo de que solo pueda escribir que tenemos la mejor selección y que seremos los campeones del mundo. Es bastante tentador hacerlo, y quizás dentro de mí no quepa otra opción que esa. La realidad es que la selección Argentina, junto con otros cuatro equipos (Italia, Alemania, Brasil e Inglaterra), nunca comenzarán su participación en un mundial sin tener como objetivo principal ser campeón del mundo. En este punto la estadística es abrumadora, en las 18 ediciones de la Copa del Mundo, siempre ha habido uno de estos cinco países en la final, y en 15 oportunidades alguno de ellos ha sido el campeón (los otros tres fueron dos para Uruguay y uno para Francia).
Primero vayamos a los números de la selección Argentina. Ha participado en 14 copas del mundo (afuera de 1938, 1950, 1954 y 1970) llegando a la final en cuatro oportunidades con un 50% de efectividad (1978 y 1986). Ha jugado 65 partidos en mundiales, con 33 victorias, 13 empates y 19 derrotas. Como dato anecdótico podemos decir que siempre que la selección argentina ha llegado a la semifinal, gano y paso a la final. Nunca ha jugado el partido por el tercer y cuarto puesto.
En los últimos años el hecho más relevante para el futbol argentino fue la eliminación en primera ronda en el mundial 2002. Fue un golpe durísimo para la selección y para sus seguidores. Con cierto escepticismo, se llegó al mundial 2006. La etapa clasificatoria no fue tan brillante como la del 2002, pero se formó un grupo realmente sólido, que permitió que en muy poco tiempo, la herida se sintiera medianamente sanada, y se viajó a Alemania con grandes ilusiones. Mucho se había hablado del peligro que suponía Serbia y Montenegro, lo difícil que sería derrotar a Holanda, y la peligrosidad del físico de Costa de Marfil liderados por un brillante Drogba. La realidad es que Argentina deslumbró desde un primer momento. La valla imbatible de Serbia recibió seis goles, incluido el mejor gol del mundial hecho por Cambiasso luego de 25 pases consecutivos. Se derrotó a Costa de Marfil en el debut, y se llegó al partido con Holanda con la clasificación asegurada. Un empate alcanzó para terminar en lo más alto del grupo por diferencia de gol, y prepararse para enfrentar a México en octavos. Un partido durísimo, en el que Argentina demostró que también sabía jugar partidos cerrados, un zapatazo de Maxi Rodríguez en tiempo extra, selló la suerte Argentina y nos depositó en cuartos de final, donde nos esperaba la selección local. Mucho se habló antes de ese partido, muchos tenían miedo, muchos estaban confiados, la realidad es que todos creían muy posible vencer, y la selección así lo demostró. En el segundo tiempo un gol temprano de Ayala de cabeza ponía el 1-0 y los alemanes sufrían al encontrarse por primera vez en el mundial en desventaja. La Argentina jugó un partido brillante, la defensa funcionó no solo en este partido, sino en todo el mundial, como una de las más coordinadas y precisas que haya tenido Argentina. Pero un descuido alcanzó para que Klose sellara el empate en uno, cuando faltaban 10 minutos para que terminara el partido. De ahí en más no se sacaron ventajas y el partido fue a los penales. Allí, los alemanes metieron los cuatro que patearon y eliminaron a Argentina por 4-2 tras las tapadas de Lehman a Ayala y Cambiasso. Al igual que en el 2002 la tristeza fue gigantesca. Pero las razones eran muy distintas. Desde mi punto de vista al menos, aun no logro entender como aquella selección de Pekerman no fue campeona del mundo. Creo que la única forma de que saliera derrotada era por penales, ya que su solidez durante el partido era realmente admirable. La tristeza fue grande sí, pero también lo fue el orgullo que inspiraron. El orgullo que los jugadores tenían entre sí por haber formado parte de un grupo que se dedicó a jugar al fútbol con muchos momentos de altísimo nivel. El orgullo que transmitieron a los argentinos, ya que en ningún momento bajaron la guardia, dejaron todo siempre, y merecieron mucho más. Fue una selección que nos invita a inflar el pecho y levantar la cabeza cada vez que se recuerda aquel mundial.
Al 2010 Argentina no llega de la mejor manera. Primero con Basile y después con Maradona, clasificó en el cuarto puesto con 28 puntos, sacando diferencias en las últimas dos fechas con victorias ante Perú y Uruguay. Maradona fue muy criticado y su relación con la prensa nunca terminó de afianzarse (al igual que a lo largo de toda su carrera). También hubo problemas entre técnicos y jugadores, rumores de complot, demasiadas cosas. Lo cierto es que dentro de un mes la selección argentina estará debutando en el mundial frente a Nigeria, y eso, en definitiva, es lo único que deberá importar. Con la base para jugar el mundial prácticamente definida, aun quedan un par de dudas antes de confirmar el equipo (espero de todo corazón que Esteban Cambiasso este entre los 23). Argentina tiene un amistoso confirmado frente a Canadá y otro en duda frente a Emiratos Árabes Unidos. En las últimas horas se está barajando la idea de jugar un amistoso frente a Sudáfrica en los últimos días de Mayo.
Para la selección Argentina será muy importante que los jugadores se sientan seguros y logren aislarse de cualquier conflicto externo que aceche a la selección. Jugadores de sobra tendrá la selección, incluido el mejor jugador del mundo. Definitivamente necesitará de un Messi en su mejor versión. A pesar de no haber tenido grandes actuaciones en la selección, Messi es un jugador que esta camino a ser uno de los mejores de la historia del fútbol, pero nunca podrá ostentar ese título hasta que sea campeón del mundo, solo así será realmente grande. No tengo dudas que tiene la actitud para lograrlo, si logra acomodarse dentro del grupo, y encuentra conexiones futbolísticas con sus compañeros, entonces nada podrá evitar que Argentina llegue lejos…muy lejos.
Como nota personal, bienvenidos a la recta final de la copa del mundo, disfruten de este último mes de nudos en la garganta con compilados de la selección, canciones mundialistas y la imaginación de los creativos. Banquemos a los que viajen, inflemos el pecho y preparemos las gargantas porque el 12 de Junio puede ser el comienzo de algo muy grande, confiemos todos juntos, que este mundial, termina con lágrimas de felicidad.
Primero vayamos a los números de la selección Argentina. Ha participado en 14 copas del mundo (afuera de 1938, 1950, 1954 y 1970) llegando a la final en cuatro oportunidades con un 50% de efectividad (1978 y 1986). Ha jugado 65 partidos en mundiales, con 33 victorias, 13 empates y 19 derrotas. Como dato anecdótico podemos decir que siempre que la selección argentina ha llegado a la semifinal, gano y paso a la final. Nunca ha jugado el partido por el tercer y cuarto puesto.
En los últimos años el hecho más relevante para el futbol argentino fue la eliminación en primera ronda en el mundial 2002. Fue un golpe durísimo para la selección y para sus seguidores. Con cierto escepticismo, se llegó al mundial 2006. La etapa clasificatoria no fue tan brillante como la del 2002, pero se formó un grupo realmente sólido, que permitió que en muy poco tiempo, la herida se sintiera medianamente sanada, y se viajó a Alemania con grandes ilusiones. Mucho se había hablado del peligro que suponía Serbia y Montenegro, lo difícil que sería derrotar a Holanda, y la peligrosidad del físico de Costa de Marfil liderados por un brillante Drogba. La realidad es que Argentina deslumbró desde un primer momento. La valla imbatible de Serbia recibió seis goles, incluido el mejor gol del mundial hecho por Cambiasso luego de 25 pases consecutivos. Se derrotó a Costa de Marfil en el debut, y se llegó al partido con Holanda con la clasificación asegurada. Un empate alcanzó para terminar en lo más alto del grupo por diferencia de gol, y prepararse para enfrentar a México en octavos. Un partido durísimo, en el que Argentina demostró que también sabía jugar partidos cerrados, un zapatazo de Maxi Rodríguez en tiempo extra, selló la suerte Argentina y nos depositó en cuartos de final, donde nos esperaba la selección local. Mucho se habló antes de ese partido, muchos tenían miedo, muchos estaban confiados, la realidad es que todos creían muy posible vencer, y la selección así lo demostró. En el segundo tiempo un gol temprano de Ayala de cabeza ponía el 1-0 y los alemanes sufrían al encontrarse por primera vez en el mundial en desventaja. La Argentina jugó un partido brillante, la defensa funcionó no solo en este partido, sino en todo el mundial, como una de las más coordinadas y precisas que haya tenido Argentina. Pero un descuido alcanzó para que Klose sellara el empate en uno, cuando faltaban 10 minutos para que terminara el partido. De ahí en más no se sacaron ventajas y el partido fue a los penales. Allí, los alemanes metieron los cuatro que patearon y eliminaron a Argentina por 4-2 tras las tapadas de Lehman a Ayala y Cambiasso. Al igual que en el 2002 la tristeza fue gigantesca. Pero las razones eran muy distintas. Desde mi punto de vista al menos, aun no logro entender como aquella selección de Pekerman no fue campeona del mundo. Creo que la única forma de que saliera derrotada era por penales, ya que su solidez durante el partido era realmente admirable. La tristeza fue grande sí, pero también lo fue el orgullo que inspiraron. El orgullo que los jugadores tenían entre sí por haber formado parte de un grupo que se dedicó a jugar al fútbol con muchos momentos de altísimo nivel. El orgullo que transmitieron a los argentinos, ya que en ningún momento bajaron la guardia, dejaron todo siempre, y merecieron mucho más. Fue una selección que nos invita a inflar el pecho y levantar la cabeza cada vez que se recuerda aquel mundial.
Al 2010 Argentina no llega de la mejor manera. Primero con Basile y después con Maradona, clasificó en el cuarto puesto con 28 puntos, sacando diferencias en las últimas dos fechas con victorias ante Perú y Uruguay. Maradona fue muy criticado y su relación con la prensa nunca terminó de afianzarse (al igual que a lo largo de toda su carrera). También hubo problemas entre técnicos y jugadores, rumores de complot, demasiadas cosas. Lo cierto es que dentro de un mes la selección argentina estará debutando en el mundial frente a Nigeria, y eso, en definitiva, es lo único que deberá importar. Con la base para jugar el mundial prácticamente definida, aun quedan un par de dudas antes de confirmar el equipo (espero de todo corazón que Esteban Cambiasso este entre los 23). Argentina tiene un amistoso confirmado frente a Canadá y otro en duda frente a Emiratos Árabes Unidos. En las últimas horas se está barajando la idea de jugar un amistoso frente a Sudáfrica en los últimos días de Mayo.
Para la selección Argentina será muy importante que los jugadores se sientan seguros y logren aislarse de cualquier conflicto externo que aceche a la selección. Jugadores de sobra tendrá la selección, incluido el mejor jugador del mundo. Definitivamente necesitará de un Messi en su mejor versión. A pesar de no haber tenido grandes actuaciones en la selección, Messi es un jugador que esta camino a ser uno de los mejores de la historia del fútbol, pero nunca podrá ostentar ese título hasta que sea campeón del mundo, solo así será realmente grande. No tengo dudas que tiene la actitud para lograrlo, si logra acomodarse dentro del grupo, y encuentra conexiones futbolísticas con sus compañeros, entonces nada podrá evitar que Argentina llegue lejos…muy lejos.
Como nota personal, bienvenidos a la recta final de la copa del mundo, disfruten de este último mes de nudos en la garganta con compilados de la selección, canciones mundialistas y la imaginación de los creativos. Banquemos a los que viajen, inflemos el pecho y preparemos las gargantas porque el 12 de Junio puede ser el comienzo de algo muy grande, confiemos todos juntos, que este mundial, termina con lágrimas de felicidad.
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